El argentino Adrián Villar Rojas (Rosario, 1980) y el colombiano Óscar Murillo (Paila, 1986), los dos 'enfants terribles' del arte iberoamericano, han sido invitados a la 6ª Bienal de Marrakech, el mayor evento triligue -árabe, inglés y francés- de arte contemporáneo, cine y literatura del Norte de África, que se celebra del 24 de febrero al 8 de mayo, en esta ciudad marroquí, bajo el comisariado de Reem Fadda, comisaria asociada de Arte de Oriente Medio para el Solomon R. Guggenheim de Abu Dhabi, quien ha contado con la asistencia curatorial de Ilaria Conti.

Sin lugar a dudas, en los últimos tiempos, ambos artistas representan como ningún otro el éxito temprano en el mundo del arte, al conseguir, a su corta edad, grandes hitos profesionales que muy pocos de sus colegas logran a lo largo de toda su carrera.

Villar, a quien ARTEINFORMADO ha entrevistado recientemente, comienza el año con fuerza tras un 2015 pletórico que le llevó a la Sharjah Biennial (Emiratos Árabes); a tener su primera individual en Escandinavia (con carácter retrospectivo) en el Moderna Museet de Estocolmo (Suecia); a la Bienal de La Habana; a la Bienal de Estambul; a inaugurar su primera individual en la galería Marian Goodman de Nueva York, y, finalmente, a estrenarse en solitario en Italia con una exposición en la Fondazione Sandretto Re Rebaudengo de Turín.

Por su parte, Murillo, con base en Londres, también se ha mostrado imparable el pasado año: tomó parte en la "56ª Bienal de Venecia"; en la "31ª Biennial of Graphic Arts de Ljubljana"; tuvo su primera exposición individual en Colombia, en el Museo de Arte de la Universidad Nacional de Colombia, en Bogotá; fue uno de los artistas colombianos destacados dentro del programa ARCOcolombia de ARCOmadrid 2015; se le pudo ver participando en "Performa", la bienal de performance neoyorquina, primera en el mundo en este género; y tuvo su primera individual en la sede londinense de la prestigiosa galería David Zwirner, tras hacerlo en su espacio de Nueva York, un año antes.

Por si fuera poco, Murillo, a pesar de su juventud, ha vuelto a ser uno de los artistas iberoamericanos más cotizados dentro del mercado secundario en 2015.

Además de a Marrakech, el colombiano también ha sido invitado a la próxima 20ª Bienal de Sídney, a celebrar del 18 de marzo al 5 de junio de 2016, y tiene prevista una exposición individual esta próxima primavera en el Yarat Contemporary Art Centre en Baku (Azerbaiyán).

Tanto Villar Rojas como Murillo están representados por dos de las galerías comerciales más importantes del mundo como son las neoyorquinas Marian Goodman y David Zwirner, respectivamente, y ambos tienen obra en las más destacadas colecciones internacionales de arte, tanto públicas como privadas.

La sexta Bienal de Marrakech, que lleva el título de "No Nuevo Ahora" se centrará en artistas que hacen trabajos políticos que responden a las condiciones de la vida cotidiana.

Así, además del argentino y del colombiano, participan otros 44 artistas, siendo una mayoría de ellos africanos o ligados al continente como el franco-algerino Kader Attia (Francia, 1970), la franco-marroquí Yto Barrada (París, 1971), la libanesa Mona Hatoum (Beirut, 1952), el argelino Eric Van Hove (Guelma, 1975) y el español, afincado en Marrakech, Juan Asís Palao (Madrid, 1978), entre otros. Completan la lista artistas de gran renombre internacional como el colectivo danés Superflex y el colectivo británico The Otolith Group.

La Bienal se extiende principalmente en cinco lugares históricos de la medina de Marrakech: la Mezquita Kutubía, el Palacio El Badi, el Palacio de la Bahía, Dar Si Said y el Pabellón y Jardines de Menara.

Al mismo tiempo, una selección de socios y proyectos paralelos estará abierta al público en toda la ciudad. Por primera vez, la Bienal será de acceso gratuito, buscando llegar a un público más amplio y reforzar la conexión de la Bienal con el histórico paisaje urbano de Marrakech.