La obra de Javier Granados tiene dos puntos constantes en su trayectoria, pese a los cambios de series o temáticas, por un lado el color y por otro el humor y la ironía. Como si de un estudio de los estados de ánimos, vivencias, miedos y obsesiones de las mujeres se tratara, su obra trata con ironía nuestro devenir.

Sus rollizas marujas son gozosas, simpáticas, bonitas, y muy españolas ya desde la melenita corta, la rotundidad de sus carnes enfundadas y su vestuario fresquito y cómodo de coqueto estampado para sus múltiples y muy agradecidas labores. El estereotipo marujil se rompe. Ellas se rebelan y reivindican su libre albedrío, derecho a reunión y a la búsqueda del placer y bienestar propio.

Siguiendo con esta temática se presentan diez plastilinas, que material más naif se puede usar para esta ... visión tan personal del universo femenino.