En medio de la globalización de la sociedad moderna, se está prestando gran atención al intercambio cultural. Se ha está empezando a dar importancia a varias formas de colaboración internacional, empezando con la cooperación transnacional como con las empresas internacionales, los desarrollos en tecnología, la planificación de proyectos ecológicos, etc. Desde hace poco, se están poniendo en marcha muchos proyectos de intercambio internacional en varias regiones para construir una fundación de cooperación internacional.

El significado auténtico del intercambio internacional es la aceptación y apreciación mutua de las diferencias culturales. Creemos que sólo se alcanza este al llegar a tener un verdadero respeto hacia la cultura extranjera.

La cultura nace como señal del progreso de la humanidad y del desarrollo como ser humano que refleja cada etapa. Y el arte es la cristalización de la cultura más sublime de la humanidad.

El Arte se nace desde dentro de la sociedad de cada país y región con el trasfondo de la cultura cultivada de la época. La armonía psicológica y emocional del país y de su sociedad puede derivarse del intercambio cultural a través del arte con el trasfondo del impulso hacia la comprensión de la cultura.

Creemos que acertaríamos en decir que el arte es una realidad que cruza la frontera de la política, raza, religión política y lengua en la sociedad internacional y que fluye hacia el público general sin distinción. Con el arte como centro de intercambio internacional, será muy importante a partir de ahora en la evolución creciente de globalización de la sociedad internacional buscar la comprensión mutua genuina.

En este proyecto limitamos el tamaño de la obra de arte a 'un pie cuadrado'. Nuestro objetivo es hacer que cada artista transmita el infinito mundo de su trabajo en este espacio limitado. Como el nombre sugiere, el pie cuadrado es una unidad de tamaño del pie de un ser humano y es un tamaño reconocido como un tamaño mínimo factible para la existencia. Además, nos gustaría instar a cada artista y los espectadores, como cohabitantes de nuestro mundo, para que vuelvan a confirmar el sentido de su existencia y su punto de mira.