La galería de arte Yvonne Sanguineti presenta la exposición 'Ciudades invisibles', individual realizada por el arquitecto y artista plástico Franco Vella. La muestra está conformada por una selección de pinturas de mediano formato.

Franco Vella se graduó de la Facultad de Arquitectura de la UNI para posteriormente hacer un Doctorado en la Facoltá Degli Studi Di Roma, en Italia. Tiene una experiencia de más de cuarenta años como arquitecto independiente, trabajando en proyectos de edificios multifamiliares, centros culturales y comerciales, y bancos. Sus proyectos arquitectónicos más representativos son el Museo de la Nación, la Biblioteca central de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, Centrum Católica y la Nueva Biblioteca Nacional del Perú.

Ha obtenido premios tanto en bienales internacionales como nacionales, entre ellas: Mención honrosa en Bienales de Quito, Primeros premios en Bienales de Lima, Premio Celima ... 2002 y Hexágono de Oro de la Bienal de Lima (2006). El año que pasó tuvo su primera exposición individual, en la Galería Yvonne Sanguineti, a la que tituló Pinturas.

La obra de arte dialoga. Su genialidad radica en la capacidad para ser un interlocutor incesante, vital, controvertido, a veces dócil, otras, radical. En Ciudades invisibles Vella dialoga, al tiempo con el texto, al tiempo con el trazo, el color, la paleta; su identidad de arquitecto, de plástico, finalmente de artista, le permite transitar entre la narrativa fantástica de Marco Polo -en la pluma de Ítalo Calvino- y la imagen plasmada en el óleo.

Pero la propuesta del pintor no se detiene en la simple representación estática de su mirada. Vella alude a una selección cromática que, unida a la intensidad de un trazo preciso, oscilante entre lo dinámico y lo sensible, decanta en una alegoría de la decadencia y el renacimiento continuo de la ciudad como el escenario inevitable donde se despliega el drama de lo humano. En palabras de Calvino: Lo que importa es descubrir las razones secretas que han llevado a los hombres a vivir en las ciudades, razones que pueden valer más allá de todas las crisis. Las ciudades son signos de muchas cosas: memorias, deseos, signos de un lenguaje.

Inserto el pintor entonces, como un participante más, en el intercambio entre Marco Polo y Kublai Kan, recrea sus propias crónicas en las que, entre la estética inmóvil de la plástica, y la cadencia poética de la prosa, construye ciudades habitables en la fantasía de cada espectador. Marco Polo diría: Al llegar a cada nueva ciudad el viajero encuentra un pasado suyo que ya no sabía que tenía: la extrañeza de lo que no eres o no posees más te espera al paso en los lugares extraños y no poseídos.