Algeciras y su entorno es tierra fronteriza. Fronteras que son únicamente físicas, puesto que aquí, en esta encrucijada, culturas, razas, civilizaciones, se abrazan desde la noche de los tiempos, pero a veces, esas fronteras físicas se convierten en barreras difícilmente salvables.
Pero hay una cualidad que logra superar todas esas fronteras, y no es otra que el arte. Y si el arte se aplica a la humanidad, a los sentimientos, a la sensibilidad, tenemos como resultado el trabajo que nos presenta este algecireño, Antonio Jesús Pérez García, que nos abre su corazón y su paleta cromática.
Antonio Jesús, por su condición de servidor público, es perfecto conocedor de una de las duras y poliédricas realidades que en esta tierra vivimos a veces, y que tiene como protagonistas a quienes movidos por la desesperación, y por el sueño, en la mayoría de las veces quimérico, de alcanzar un mundo mejor, se embarcan en...la incierta travesía de cruzar fronteras para llegar a un El Dorado, que en ocasiones arroja más sombras que luces.
Pero para el artista, siempre hay lugar para la esperanza en el entorno de este drama humano que representa la inmigración clandestina, nunca ilegal, puesto que las personas no lo son. Esa esperanza se refleja en la explosión de colores que emerge de sus lienzos, y que nos lleva a pensar que algún día, este será un mundo mejor, donde todos seamos iguales y podamos disfrutar de las mismas oportunidades.
En el año 2001, el cantante argentino Diego Torres se hizo popular en el mundo entero con un tema que llevaba por título “Color esperanza”. Creo sinceramente que así es como mejor puede definirse esta exposición, que representa una llamada a nuestras conciencias, al tiempo que una invitación a la reflexión.
Pasen, vean, y sobre todo, disfrútenla.
José Ignacio Landaluce Calleja
Alcalde de Algeciras
Entrada actualizada el el 25 oct de 2016
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