La pérdida global de biodiversidad y, particularmente, la extinción de los insectos resulta indisociable de las profundas alteraciones que ha experimentado el medio rural a nivel planetario, tras la introducción progresiva de la agricultura y la ganadería intensivas. Desde el año 2004 hasta el año 2012, el artista madrileño José Luis Viñas, afincado en Palencia, recorrió comarcas ibéricas en declive y abandono. Con sus fabulaciones documentales y poéticas, trataba de reconstruir la existencia de sus últimos habitantes convertidos en sombras. A partir de 2017 empieza a explorar la conexión entre biodiversidad y arte contemporáneo, construyendo instalaciones efímeras que rinden homenaje a las especies extinguidas. La exposición tiene como hilo conductor la presencia/ausencia de los insectos en el trabajo del artista durante todo este tiempo, en su doble vertiente antropológica y biológica. En colaboración con la Muestra Internacional de Cine de Palencia.