Doscientos Sesenta y Ocho es una obra expositiva y performativa creada por el artista Abel Azcona en la Isla de San Servolo de Venecia. La obra fue una de las protagonistas del pabellón CORPO organizado por el Centro di Archivizioni e Promozione della Performing Art, donde la obra de Azcona fue seleccionada y exhibida manera individual, junto a dos exposiciones completas de precursores del accionismo como Hermann Nitsch y Otto Muehl. El artista Abel Azcona permaneció durante más de nueve horas consumiendo de forma consecutiva, sin respiro, doscientos sesenta y ocho cigarros hasta la intoxicación. Los mismos que días en su proceso de gestación, de nuevo rememorando el proceso en el vientre de su madre biológica, marcado por el consumo de alcohol y heroína. El artista fue fotografiado en diferentes espacios de la isla que sugieren ideas de maternidad, concluyendo una obra marcada por la resistencia, la intoxicación y un proceso doloroso con un espíritu crítico.