En la formación del artista plástico, una de las disciplinas básicas ha sido el dibujo al natural del cuerpo humano. Es un tema frecuente en la iconografía de muchos artistas, de los clásicos hasta los vanguardistas, como atestiguan museos de todo el mundo. Presentan como curiosidad, un dibujo de un desnudo de Joan Miró de 1917 y otro de la misma época de Enric-Cristòfor Ricart, cuando ambos compartían estudio en la calle Sant Pere Més Baix de Barcelona. Destaca también, un óleo original de Ramon Rogent, "Tres desnudos en colores", que estuvo en la Bienal Hispanoamericana del Arte de 1951 bajo el título "Composición".