Descripción de la Exposición
En la antigua Roma, hasta el emperador Augusto, los cónsules romanos que obtenían grandes victorias en la guerra, entraban junto con sus legiones y prisioneros, en un cortejo triunfal en la ciudad de Roma. En esta antigua costumbre, de origen Sabino, al final del cortejo iba el cónsul victorioso montado en un carro tirado por caballos. En el carro, justo detrás del cónsul, se colocaba un esclavo. Este mantenía sobre la cabeza del cónsul una corona triunfal. Al mismo tiempo, durante todo el trayecto, el esclavo le susurraba al oído "Memento mori" que significa "Recuerda que eres mortal". Con esta letanía se le dejaba claro al Cónsul que no era un dios, que su posición en la vida era pasajera, que su singularidad estaba supeditada al grupo, al rebaño...
La idea de rebaño y de individuo, de los corderos, se puede comparar de algún modo con las personas. En principio cada uno tiene y conserva un comportamiento distinto a los demás, una "expresión", etc... A los humanos les gusta sentirse seres individuales y únicos, libres y poderosos. Seres que no están supeditados a un rebaño ni a las decisiones que éste toma sobre nosotros. Pero el miedo nos hace agruparnos como manada o rebaño. Este miedo se convierte en una forma de control de unas personas sobre otras.
Dentro del rebaño queremos tomar nuestras propias decisiones pero esto raramente es así y al final suelen ocurrir dos cosas: o la masa decide por nosotros o este miedo permite que algunas personas lo utilicen para moldear y dirigir nuestra existencia anulando nuestro pensamiento o haciendo que funcione de forma perezosa.
Habitualmente las personas, durante su vida, aceptan lo que les ocurre sin pestañear. Aceptan el instinto enfermizo de seguir a la masa o a un líder de acuerdo con la jerarquía social. Aceptan la tentación de tener una imagen falsa e idealizada de sí mismos pero detestando la moral de rebaño de los que siguen a la mayoría.
Para nosotros, a semejanza de los corderos de esta serie de fotografías, poco importa nuestro aspecto, forma de ser e imagen que damos al exterior cuando estamos vivos. Una vez muertos el final es el mismo. La vida es un proceso y la muerte forma parte de este proceso. En cierta medida nuestra vida y la del resto de los seres vivos solo es el principio de todo esto. Y en los humanos esto es independientemente de nuestras vivencias, nuestros logros, nuestro poder y nuestras posesiones.
La exposición "MEMENTO MORI" la componen 26 fotografías en color de corderos vivos y muertos, agrupadas por parejas.
La representación de los muertos y de la muerte suele ser un tema tabú en nuestra cultura y sociedad. Ante este tipo de representaciones mantenemos diferentes posturas en función de si lo representado es un humano o un animal.
El tratamiento que se hace en los telediarios sobre el sufrimiento de los humanos o los animales, y su impacto en nuestras conciencias, es distinto en los dos casos. En Occidente la mayoría de las veces, con los animales domésticos la sensación que tenemos al mostrar su sufrimiento o muerte es más desagradable y brutal de lo que sentimos cuando vemos los telediarios y muestran imágenes de guerra o de hambruna en algún lejano país. Es curioso, por ejemplo, que en una película de cine donde aparezcan animales en los créditos colocan un texto en el que nos indican que no han torturado a ningún animal en el rodaje de la película. Pero nada nos indica si el productor y/o el director han explotado a los trabajadores, han ejercido mobbing sobre ellos o los han alimentado correctamente.
Exposición. 14 may de 2025 - 08 sep de 2025 / Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía (MNCARS) / Madrid, España
Formación. 30 oct de 2025 - 11 jun de 2026 / Museo Nacional del Prado / Madrid, España