FUERZA Y
EQUILIBRIO
Artistas mujeres en las colecciones de la SHCP
Yolanda Andrade Estrella Carmona Leonora Carrington Lola Cueto Manuela Generali Rosario Guillermo Rocío Maldonado Laura Quintanilla Carla Rippey Conchita Rivera Susana Sierra Trini Cordelia Urueta Marysole Wörner Baz
El arte, en su aspecto global, no es una creación inútil de objetos que se deshacen en el vacío, sino una fuerza útil que sirve al desarrollo y a la sensibilización del alma humana.
Vasili Kandinsky
Dentro del marco de la celebración del Día Internacional de la Mujer, el Museo de Arte de la SHCP, presenta esta exposición que
centra la mirada en la mujer como sujeto del arte y quienes a lo largo del tiempo han luchado por el reconocimiento a su labor creativa.
Desde tiempos remotos la mujer participó en la la- bor creativa en el campo de las artes, ejemplo de ello es el descrito por Cayo Plinio Segundo (Plinio el Viejo,...23-79 d. C.) en su Historia Natural, en la que señala que la pintura fue una invención femenina: la joven hija del alfarero Butades Sicyonius (siglo VII a.C.) trazó sobre un muro el contorno de la sombra del rostro de su amado cuando partía para lejanas tierras. Asimismo este autor realizaría un claro regis- tro sobre una serie de pintoras, entre las cuales men- ciona a las griegas que vivieron antes de su época: Timarte, Aristarete y Olympia; así como a Calypso, Helena de Egipto y Laia de Kyzikos.
Otro ejemplo documentado se hace evidente a través de un manuscrito de la Alta Edad Media en el siglo X (975 d. C.), en el ejemplar del Comentario del Apocalipsis del Beato de Liébana, el cual se conser- va en la Catedral de Gerona en el que aparecen los nombres de Ende “pintora y sierva de Dios” (pintrix et Dei adiutrix) y del monje Emeterio.
Nombres de mujeres artistas a los que se suman los de Artemisia Gentileschi (1593–1654), Susana Horne- bolt (1503–1554), Mary Cassatt (1844–1926), Camille Claudel (1864–1943), Beatrix Potter (1866–1943), Georgia O’Keeffe (1887–1986), Tamara de Lempic- ka (1898–1980), Frida Kahlo (1907–1954), Louise Bour- geois (1911–2010) y Leonora Carrington (1917–2011), entre otros. Lo anterior comprueba que las mujeres han tenido una presencia activa constante como ar- tistas en las distintas épocas.
El título de la presente selección, no sólo alude a características propias de la personalidad femenina, sino también a dos rasgos formales que encierran las obras aquí reunidas: “Fuerza y equilibrio”. Si bien, el corpus que se presenta bajo este título se identifica por una heterogeneidad, se trata de una selección representativa de las artistas que integran los inven- tarios en custodia de la SHCP, el Acervo Patrimonial y la Colección Pago en Especie; en esta última, se registra un total de 184 mujeres, de 758 artistas, o sea, un 24.27%, que han participado en el citado programa.
Asimismo, cabe mencionar que la fuerza y el equilibrio se ven reflejadas en las estructuras formales a través de sus proporciones y relaciones internas, cuyas infinitas combinaciones producen la gran diversidad de representaciones e imágenes, induciendo al espectador a un estado de ánimo.
Si bien éstas parecen contraponerse, ya que se en- tiende por equilibrio el estado de distribución de las partes por el cual todo llega a una situación de re- poso, aún dentro del mismo movimiento, es precisa- mente la fuerza un resultado de esta armonía; la pres- encia de contrastes y tensiones entre elementos que crean el impacto de una obra de arte, captando la atención del espectador. Esto es posible resumirlo en el contenido del conocido diálogo de Platón: “Ion o Sobre la Ilíada”, llamado también “De la poesía” (401 a. C.), en el que Sócrates definía el arte como una excitación y una transmisión de fuerza, como la fuerza de la exaltación o del entusiasmo. Es así como podemos decir que es en el arte donde la sensibilidad sirve como medio para la fusión perfecta de la fuerza con el equilibrio.
Una de las cuestiones ideológicas tema de debate en el arte, es la definición de la estética femenina como una categoría simbólico-discursiva, ya que ésta ha sido desarrollada y proscrita a aspectos meramente formales por los sistemas de representación cultural a través de los tiempos, entendiéndose como “femenino” al trabajo reaizado por las artistas de este género o confinándolo de manera convencional a formas o temas, es decir, asumir lo femenino como una condición pasiva, en el que la afectividad, lo doméstico, lo bonito y lo cursi se establecen como un estereotipo.
Es por ello que la presente selección pretende eviden- ciar la ruptura de los paradigmas que definen lo mas- culino y lo femenino en el arte; campo en el que los individuos generan un trabajo sin distinción.
Entrada actualizada el el 04 ago de 2021
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