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“Hasta el ... infinito y más allá”. Esta “frase de cine”, de cine de animación, da nombre a la exposición que ha sido presentada esta mañana en el Centro de las Artes de Sevilla por la delegada de Cultura del Ayuntamiento de Sevilla, Mª Isabel Montaño, el propio director del centro, Fernando Roldán y el comisario de la exposición, Antonio López. “Esta frase no debe ser despreciada pues recoge la ideología de la posmodernidad” ha argumentado éste último, “sintetiza el ideario utópico de un futuro mejor”.

Un futuro mejor para José Dávila, François-Xavier Courrèges, José Miguel Pereñíguez, Llorenç Ugas, Marina Rodríguez, Nelo Vinuesa, Rebeca Menéndez y Santiago Cirugeda, que no son otros que los ocho artistas emergentes elegidos por las propias galerías que los representan, las más importantes de “programación de riesgo” del país, para esta exposición. En ellos deposita el Centro de las Artes de Sevilla su total confianza sirviéndoles como plataforma, pues como ha asegurado Fernando Roldán, su director “ellos son los nombres del mañana”. Opinión que ha constatado con hechos concretos el comisario de la exposición: “La Beca Velázquez concedida por Gordillo a José Miguel Pereñíguez, el Premio a la Actividad Artística entregado a Santiago Cirugeda por la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía, la selección de Llorenç Ugas como uno de los tres fotógrafos internacionales que llevarán a cabo los recorridos fotográficos de Arco o la presencia del mejicano José Dávila en Cream 3, la biblia internacional del arte emergente, nos confirman que no nos hemos equivocado, que ninguno de los que están aquí, en esta exposición, debería estar fuera”.

Un futuro mejor también para el Centro de las Artes de Sevilla, para el que “Hasta el infinito y más allá” es, como ha anunciado su director, “un punto de inflexión ya que la calidad de la exposición ha permitido que el caS pueda entrar dentro del circuito nacional del arte contemporáneo”. Tras un período de adaptación esta exposición supone una declaración de

intenciones por parte del centro, que se consolida con un posicionamiento claro, el de constituirse como centro experimental, de nuevas tendencias, de arte emergente, siendo el escaparate de los nuevos valores, asumiendo una programación de riesgo. En este sentido Fernando Roldán ha agradecido el apoyo recibido por el Ayuntamiento de Sevilla, mencionando especialmente a Mª Isabel Montaño, “es muy difícil que desde las instituciones se apoye este tipo de programación, el Instituto de la Cultura y las Artes de Sevilla es una maravillosa excepción” ha comentado el director del caS. El comisario de la exposición, Antonio López, también ha alabado la labor del ayuntamiento en este sentido “la libertad ha sido absoluta a lo largo de todo el proceso, en ningún momento se me ha impuesto nada, cosa que normalmente suele pasar con otras instituciones en este tipo de exposiciones prospectivas”.

Y es que, tal y como ha manifestado la delegada de Cultura, “Sevilla es una ciudad que tiene una larga y rica tradición, pero que mira y apuesta por el futuro, que sabe aunar tradición y vanguardia”. Mª Isabel Montaño ha puesto como ejemplo el mismo Monasterio de San Clemente donde está ubicado el caS, un espacio que sabe jugar con el pasado y con el futuro, un lugar que, como ella misma ha señalado, “comienza con esta exposición una firme andadura, un centro que está consiguiendo irradiar actividad a la ciudad, que está empezando a ser visible a nivel nacional y que quiere estar presente en el panorama internacional; podemos ir hasta el infinito y más allá”.