-------------------------------------------------------

-------------------------------------------------------

NoguerasBlanchard presenta una selección de películas del Cine de la Transgresión, una variante del cine experimental neoyorquino de los años ochenta que ha sido eludida por muestras institucionales (como el reciente programa cinematográfico del MACBA, Cinevisión. Algunas obras maestras del cine experimental, 1956-2000), probablemente debido a la crudeza de la narrativa de las películas, producidas con medios irrisorios, y exhibidas de forma subterránea. Al considerar que el Cine de la Transgresión es una de las principales modalidades del underground norteamericano, decidimos programar por nuestra cuenta un ciclo de las películas más representativas de los cineastas de esta época. Kill Yr Idols ilustra la variedad de estrategias cinematográficas empleadas en los cortometrajes de Nick Zedd, Richard Kern, Tessa Hughes-Freeland, Kembra Pfahler, Jon Moritsugu, Henry Jones y David Wojnarowicz en los años de más apogeo de este movimiento. El ... título Kill Yr Idols está tomado del album de Sonic Youth (1983) con el mismo nombre y referencia la corriente musical No Wave, caraterizada por su extremo nihilismo y deliberada fealdad, que se relacionó con el Cine de la Transgresión.

Durante los finales de la década de los setenta y principios de los York, decidían arremeter contra todas las convenciones, tanto académicas como morales, del cine (especialmente de Hollywood). ochenta, siguiendo la explosión del punk y en plena era de Reagan, los yuppies y el nacionalismo belicista, un reducido grupo de cineastas radicados en su mayoría en el Lower East Side de Nueva Alejados de los medios y la cultura oficial, compartían una deliberada intención de provocar y conmover al espectador por todos los medios. Tomando su inspiración de la escena musical extrema y brutal del ruido/jazz/post punk, un circuito de cineastas, fotógrafos, performers, actores y artistas comenzaron a explorar nuevos modos de expresión cinematográfica con un marcado grado de obsesión por la muerte y el sexo. Personajes como Nick Zedd y Richard Kern hacían borrosa la frontera entre arte y vida real y volvían sus cámaras hacia el lado feo y vicioso de Estados Unidos, consiguiendo una serie de provocativas estampas que irradiaban maldad, violencia y belleza ocasional, en un cine que pretendía ir más allá de todas las fronteras establecidas por la sociedad.
Producidas sin financiación alguna, grabadas con film doméstico Súper 8 y empleando actores no profesionales el Cine de la Transgresión hizo de esta ausencia de medios sus rasgos distintivos. A pesar de todas estas limitaciones y dificultades, el Cine de la Transgresión logró la suficiente trascendencia como para convertir sus películas en objetos de culto y continuar la provocativa tradición del cine underground norteamericano, en particular las obras de Jack Smith, Kenneth Anger, Andy Warhol y John Waters. El Underground Film Bulletin, editado por Nick Zedd, publicaba en 1985 el manifiesto del Cine de la Transgresión: "una nueva generación de cineastas que se atreven a desgarrar la paralizante camisa de fuerza de la teoría cinematográfica en un ataque directo sobre cada sistema de valores conocido por el hombre ... y que los cambios ocurran en los alineamientos políticos, sexuales y estéticos. Nosotros vamos más allá de las ataduras de los milímetros, pantallas y proyectores hacia un estado de cine expandido."