La exposición presenta 3 secciones Fundadores, patronos y protectores de los conventos , Las devociones marianas, el culto a los Santos y Ángeles y La imagen de Dios y Objetos devocionales - que constituyen un discurso homogéneo configurado a través de las tres plantas que componen la Sala Villasís. La primera sección, Fundadores, patronos y protectores de los conventos , dedicada a los promotores de estos centros espirituales y ubicada en la segunda planta de la Sala, recoge: esculturas como la de Santa Clara -fundadora de las franciscanas- del monasterio de Santa María de Jesús que permite apreciar los cambios que Arce y Roldán introdujeron en la escultura de la segunda mitad del siglo XVII; retratos como el inmisericorde de Santa Teresa con valor sagrado de reliquia, modelo de pintura característico de la Contrarreforma, pintado por Fray Juan de Miseria; o imágenes como la de...San Fernando, una de las más antiguas y poco conocidas, realizada en torno a 1550. En lo que a la iconografía conventual se refiere, destaca las cartas y libros de Profesión, algunas tan espectaculares como la de la hermana del arzobispo María Josefa Solís Folch de Cardona, de los capuchinos de Santa Rosalía y obra de José Rubira (1767) en pleno rococó. En la segunda sección como su propio nombre indica, Las devociones marianas , el culto a los Santos y Ángeles, se reflejan a través de las piezas exhibidas, las devociones a la Virgen María, así como a los Santos y Ángeles. A modo de ejemplo, pueden citarse entre otro, las imágenes de Montañés y Mesa de la Virgen, la escultura de San Blas de Santa Inés, obra de Juan de Mesa, o la pintura del ángel de la guarda de José Risueño. Finalmente, la última y tercera sección, La imagen de Dios y Objetos devocionales , que reúne en la planta baja del Centro Cultural una serie de objetos estrechamente vinculados con la Liturgia, el Culto y la Oración. Sobresale, la imagen del crucificado, de autor anónimo y datado a mediados del siglo XVI. También, dos excepcionales fanales de finales del siglo XVII, en el que se recrean escenas en miniatura de la vida de Santa Clara, y un facsímil del libro de las moradas conservadas en las Teresas. La exhibición se completa con un área de instantáneas, a cargo del fotógrafo, Emilio Sáenz, y una proyección audiovisual sobre la vida cotidiana de las monjas (labores en los jardines y cocina, talleres y momentos de oración) en la actualidad. En definitiva, con esta exposición, la Fundación pretende mostrarnos este valioso legado de los conventos sevillanos, y especialmente de sus clausuras, que perviven junto a nosotros casi sin hacerse notar y que, además, por su complicada accesibilidad es un gran desconocido para la inmensa mayoría de los ciudadanos.
54 piezas de 14 conventos de Sevilla.
Comisario: Teodoro Falcón
Entrada actualizada el el 19 oct de 2014
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