Salvador Jiménez-Donaire (Sevilla, 1994) es graduado en Bellas Artes por la Universidad de Sevilla (Premio Extraordinario de Fin de Carrera); Máster en Investigación y Creación en Bellas Artes por la Universidad Complutense de Madrid (Mejor Expediente Académico), donde recibe una Beca de Excelencia UCM; y Master of Arts in Printmaking por la Cambridge School of Art – Anglia Ruskin University (Cambridge, Inglaterra). Su obra ha sido expuesta en las exposiciones individuales Quietud agitada (Fundación Antonio Gala para Jóvenes Creadores, Córdoba, 2018), Down Time (St. Peter’s Church, Cambridge, Inglaterra, 2019), Quietud cumplida (Catedral de Cuenca, 2019-2020) y Tiempo muerto (Colegio de España en París, Francia, 2020). Ha sido seleccionado en exposiciones colectivas internacionales (Real Academia de Bellas Artes de Amberes, Bélgica; Museo Etnográfico de Udine, Italia; Ruskin Gallery en Cambridge, Inglaterra) y nacionales (Obra Abierta – Premio Internacional de Artes Plásticas Caja de Extremadura 2019; Premio Ibercaja de Pintura Joven 2019;...Premio Nacional de Pintura Juan Francés – Fira d´Agost 2019; y XXV Certamen Europeo de Artes Plásticas – CICUS, entre otras). En 2019 le es concedido el Premio Nacional de Artes Plásticas de la Universidad de Sevilla.
Ha sido beneficiario de becas de residencia artísticas en la Fundación Antonio Gala para jóvenes creadores (2016-2017), Caravanserai Residency en Cambridge (2019) y en la Residencia de Estudiantes de Madrid (2019-2020), donde actualmente vive y trabaja.
La propuesta de exposición LA QUIETUD ES VOLVER CON LA MISIÓN CUMPLIDA en el Centro de Arte Tomás y Valiente – CEART de Fuenlabrada (20 Febrero – 10 marzo de 2020) examina la lentitud y la repetición como estrategias de creación para maximizar la experiencia perceptiva dentro de un contexto sociocultural que comprime el tiempo (por aceleración) y automatiza la mirada (por saturación).
Empleando un proceso reductivo de mark-making, los trabajos presentados (obra gráfica y plástica sobre papel) exploran nociones de paciencia, continuidad y duración. Enfatizando la potencialidad del hacer pausado y la espera contemplativa como formas de resistencia frente a las políticas de rendimiento actuales (más velocidad, más producción), el proyecto apuesta por un modo de hacer que exige detenimiento.
Recrearse en las transiciones, en los intervalos, en esos espacios donde las cosas son aún inciertas podría suponer hacer las paces con nuestro tiempo atomizado.
A nivel formal, el trabajo cristaliza por tensión entre iteración y mutabilidad; lo sistemático y lo manual; perseverancia y agotamiento; lo monótono y lo hipnótico; aburrimiento y estímulo; una manera de operar tanto física como mentalmente extenuante, pero quizá también reparadora.
“En su práctica artística, Salvador Jiménez-Donaire profundiza en las disciplinas del dibujo y la pintura con una actitud meticulosa y perfeccionista, posicionándose en contra de la saturación y contaminación visual de nuestra época. A través de la repetición manual, su propuesta persigue el sosiego y la ralentización de los tiempos creativos, asumiendo la necesidad social de recuperar la pausa como elemento esencial del ser. “
RAFAEL CANOGAR
Entrada actualizada el el 04 mar de 2020
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