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'La Ville au Coeur' es el título de la exposición individual que se inaugurará el 20 de diciembre y que recoge en 18 obras la mirada perspectivista del autor hacia las ciudades que atraparon su corazón durante sus viajes.

Pintor de la École de Paris, Serge Mendjisky (1929) estudió Bellas Artes en la capital francesa, donde pudo conocer y moverse en los mismos círculos de artistas como Picasso, Soutine, Braque y Léger. A finales de los 90, la fotografía empezó a ocupar un lugar importante en su investigación artística; sin embargo, esta evolución en su trabajo no le llevó a ser un fotógrafo, sino más bien un artista multidisciplinario capaz demodelar y reinterpretar la imagen fotográfica, captando el espíritu detrás de los lugares ... y de las cosas. El autor utiliza la técnica del collage para alterar la imagen impresa en macro-fotografías y dar forma a su visión multidimensional del mundo, creando así la técnica perspectivista. La multiplicación de los puntos de vista, el corte de tiras de impresiones y su sucesiva reconstitución semi-ordenada son un claro homenaje, en clave contemporánea, a los cubistas que fusionaban las tres dimensiones mostrando varios puntos de vista en una sola imagen.

Con la precisión que siempre acompañó su inspiración en el proceso creativo, Serge Mendjisky diseña sus obras utilizando como soporte una pared entera de su estudio. Las tiras impresas se cuelgan a la pared, caen libremente y se deslizan formando un primer boceto, que luego el artista llevará a la ordenada disposición final, deliberadamente imprevisible.

Descomponiendo y recomponiendo las imágenes de algunas de las ciudades más importantes del mundo, Serge Mendjisky crea nuevos y espectaculares escenarios urbanos que cuestionan nuestro sentido de la percepción; homenajes a los lugares donde el autor creció, Saint-Paul-de-Vence y París, se alternan con las vistas de Tokio, Venecia, Moscú, Fez y Jerusalén. Sin embargo, Nueva York es la ciudad de la que el autor toma más su inspiración, por sus líneas verticales y sus laberintos de calles talladas tan abruptamente que se podrían comparar con los cañones americanos. Manhattan en particular, según el autor, por su eterna transformación y por su estructura repetitiva pero siempre diferente, parece dar ya de por sí una sensación de fragmentación.

La obra de Serge Mendjisky ha sido adquirida por más de 25 museos internacionales y está incluida en algunas de las colecciones más prestigiosas del mundo.