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Guillermo Summers construye su Laberinto para mostrarnos a través de sus obras lo que de laberinto tiene la Memoria y la relevancia de la memoria dentro del Laberinto, escenario en el que se entrelazan espacio y tiempo para alcanzar la salida.

Un trabajo de introspección y de reflexión sobre nuestra propia existencia y sobre nuestro pasado pero articulado en clave de futuro: We can´t rewind, this is our time -No podemos rebobinar, este es nuestro tiempo-.   Un  díptico  que  nos  ofrece  una reflexión:  nuestro   tiempo   es  el  contexto definido por un pasado del que venimos, la Memoria, y un espacio con el que nos relacionamos, ... el  Laberinto. Vivimos en un contexto definido por la realidad y lo que ella nos evoca.

Con su Jardín de ícaros -Icarus Garden- construye un bosque de pájaros, una alusión al concepto de hombre-pájaro que encuentra en la elevación una forma de salir del Laberinto y  conjuga  esta  idea  con  la  del  concepto  de  equilibrio, de centro, como  punto  del  Laberinto desde  el  cual siempre será necesario partir para encontrar la salida.  De  nuevo  la  dualidad. El Jardín,  o  contexto,  contiene  un  espacio  en  el que se combinan el árbol y el pájaro como una metáfora de la tierra y el cielo, de lo terrenal y lo espiritual.

Sus obras sobre papel, Red Traces /Inner Garden -Rastros rojos / Jardín interior-, son un trabajo de sedimentación, estratos que configuran nuestra memoria, capas que se suman unas a otras para formar un sedimento que Summers retrata como si de una radiografía de nuestra memoria se tratara. En sus propias palabras: -'La sedimentación es crucial. La acumulación de estructuras trabajadas una y otra vez conduce al motivo, al motivo esencial de cada uno. Aquel  que  se tiene y del que no se es consciente. Geología emocional; como cuando en un proceso constante, la sedimentación y la erosión hacen que la tierra que pisamos sea como es.'-
En Islands (Islas) define un nuevo contexto en el que se relaciona lo objetivo -ubicación- y lo subjetivo -nombre- . Tal y como nos dice Summers se trata de una asociación entre el espacio físico y el emocional, lo terrenal y  lo  espiritual.  Seis  islas  que  Dédalo sobrevoló con su hijo Ícaro en su fuga.Cada una de ellas con su nombre y su localización geográfica expresada en grados y minutos en relación a los cuatro puntos cardinales: norte, sur, este y oeste. Paralelos y meridianos trazan el mapa universal y con ellos determinamos la posición ?espacio- de cualquier punto sobre la superficie de la tierra. Ubicación geográfica y tiempo se unen en su unidad de medida, el sistema sexagesimal. Un día es el tiempo que tarda la tierra en dar una vuelta completa alrededor de su eje y un año el tiempo que tarda en dar una vuelta completa al sol.

Espacio y tiempo, Laberinto y Memoria, una dualidad cuyo punto de encuentro define el contexto, nuestra posición en el espacio referida a un punto en el tiempo.