El fallo muscular es un concepto de Fitness que consiste en la incapacidad de las fibras musculares para generar la fuerza necesaria y superar la resistencia que le presenta una carga, siendo imposible realizar más repeticiones del ejercicio. Gracias a este proceso, se produce un aumento de la hormona del crecimiento cuando el organismo vuelve al reposo.
Como un deportista que se acerca al fallo durante el entrenamiento para favorecer el proceso de crecimiento, Nauzet Mayor pretende llegar más allá, acercarse un poco más a un resultado que valide su esfuerzo y le dé alguna pista para descubrir y transitar nuevos senderos. Este proyecto surge en un punto de reposo, un espacio intermedio entre la culminación de un trabajo y el comienzo de otro nuevo.
El cuerpo ha sido el epicentro en trabajos anteriores del artista y desde él retoma esta nueva etapa. Las distintas partes del cuerpo son el germen de...algo nuevo, que se expande y da lugar a nueva vida y nuevos fenómenos alejados ya del relato de su cotidianidad para centrarse ahora en contemplar la dualidad de la temporalidad y la eternidad. Desde el cuerpo como elemento central, intenta construir una historia que remita a fenómenos simbólicos que conecten al espectador con el momento presente, el aquí y ahora. Para ello, el artista ha desarrollado un conjunto de piezas que representan un cuerpo: cabeza, tronco y extremidades. Cada elemento corporal está en su propia órbita en relación con otros objetos ensamblados produciendo su propia historia al margen de los demás.
Figuradamente, llegar al fallo también hace referencia al colapso, error o cese de funcionamiento tal y como se concibe el comportamiento de un cuerpo adecuadamente sin necesidad de soportes externos. En ese sentido, pueden verse referencias a las dolencias, tratadas como resultado de la repetición continuada de una actividad, en este caso la artística.
La irrupción de la pandemia del SARS-CoV-2 ha aportado una lectura adicional a este proyecto durante su desarrollo, ya de por sí centrado en el cuerpo y sus procesos bioquímicos y fisiológicos. La idea de vida latente de diferentes microorganismos subordinados a un organismo más complejo o completo o simplemente aprovechable para otros agentes biológicos está presente en este proyecto, como musgos, texturas y objetos añadidos a las figuras corporales. El cuerpo que resucita pero que ya no es el cuerpo original y alberga otras formas de vida ajenas al control humano, como pueden ser una bacteria u hongo.
En apariencia, este trabajo se nos presenta como especie de jardín escultórico contemporáneo que nos remite constantemente al origen de todo padecimiento y goce: el propio cuerpo. A través de la creación de un ambiente inmersivo, el espectador se encuentra con las piezas de una forma alejada de la tradicional disposición lineal de objetos en el espacio expositivo. El encuentro con las obras se produce dentro de una zona de aislamiento con la finalidad de crear una sensación de asistencia a un fenómeno que está produciéndose in situ únicamente para quien esté frente a cada pieza en ese momento.
Entrada actualizada el el 24 mar de 2021
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