-------------------------------------------------------

-------------------------------------------------------

Esta original exposición brinda un homenaje a los artistas recreando la infinidad de horas que pasan sentados ya sea en sofá, silla, taburete o en el mismo suelo. También es una referencia a las horas que pasamos gestando ideas, lo que les priva de horas de estudio y lúdicas con familiares, amigos, desconocidos.

La obra de Rizzo también alberga referencias a personajes míticos y filosóficos, ficticios y reales, personas que de alguna manera influyen en su aspecto u obra.

Los materiales empleados en esta exposición son variados; los cuadros están impregnados de técnicas mixtas que mezclan óleos con barnices y esmaltes sintéticos, pintura para metales 'oxiron' así como técnicas de pintura acrílica y mezcla de materiales naturales como tierra, óxido, ... ceniza, plantas y materia orgánica. La tinta china y el acrílico son otros recursos que Rizzo emplea muy a menudo.

En el apartado de esculturas, José Rizzo trae a Mazarrón una serie de sillas fabricadas en chapa y varilla galvanizada soldadas entre sí utilizando técnicas de forja artística para los tratamientos externos anticorrosivos, que no ha empleado en todas ya que en el interés es su óxido.

Para el artista es reseñable la conexión entre escultura y pintura realizada en un lienzo, empleando una figura común en la Escuela de Arte de Murcia, como es un guiño hacia el módulo de escultura que actualmente realiza y como experimento artístico muy personal.

Rizzo ha realizado el montaje de lienzos de gran formato, hecho que ha provocado una gran satisfacción dada la magnitud de las obras, las cuales se componen en un ochenta por ciento sobre lienzo y en un veinte por ciento sobre tabla y papel.