Partiendo de imágenes mediáticas y sobre todo del cine, reformulo este recurso mediante la pintura. Así, extraigo fotogramas de películas y recontextualizo la imagen en un nuevo medio, investigando la interacción entre el lenguaje matérico del óleo y el medio cinematográfico. El uso de la imagen se nos torna entonces como el juego del despiste y el engaño. El interés por la retroalimentación entre distintos tipos de arte ha dado lugar a este proyecto, en el cual desarrollo un vínculo cine-pintura, que parte del uso del archivo de imágenes, de la investigación de éstas, y que encierra en él un ímpetu perenne: el de pintar.
Dentro del cine, busco en concreto estudiar los recursos del género del thriller y establecer un paralelismo con la pintura, fijar conexiones entre estos medios, descubrir sus similitudes y sus diferencias. A partir de aquí, tenemos tres pilares básicos: el plano, la recontextualización de la imagen...y la intriga. El plano es el fotograma que se extrae del film y que al cambiar de medio y contexto, se transforma. La intriga, que permite al espectador ejercer de detective, pues de la misma manera que buscamos las pistas que un director nos ofrece en su trama para conducirnos al final de su película, quien pinta nos brinda las pinceladas que le condujeron a la consecución de un cuadro.
(Fragmento del texto de la propia artista)
Marina Iglesias (Cádiz, 1991) es graduada en Bellas Artes en la Universidad Politécnica de Valencia. En la actualidad cursa el Máster de Producción Artística en la misma Universidad. En su joven trayectoria destaca el premio Odone de Artes Plásticas de la Cátedra DKV. Ha participado en los años 2014 y 2015 en nuestra convocatoria 100 x 100 de obras de pequeño formato y es ésta su primera exposición individual en una galería.
Entrada actualizada el el 16 feb de 2016
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