Esta propuesta artística se engendró en torno a la figura del desaparecido crítico de arte japonés Hideki Minematsu y del galerista español Alfonso González-Calero. Ambos, con una concepción romántica del arte, proponían emular al histórico Grupo Gutai bajo el prisma de generadores de un colectivo rebelde y artísticamente comprometido. El grupo se caracteriza porque cada artista desarrolla una tendencia artística individual -ya sea en pintura, escultura, fotografía o vídeo arte- creando una atmósfera ecléctica, o más bien sincrética, en sintonía con el contexto cultural japonés, entrando en paralelismo con el panorama internacional.

A nivel conceptual, la exposición de Pictograma parte del pretexto y estereotipo que occidente ha generado sobre Japón en la era postmoderna. País de espíritu radical, flota entre la base de su tradición milenaria -donde el tiempo se paralizó durante siglos- y el ritmo actual de crecimiento voraz, acelerado, descontrolado. El ... grupo se fundamenta bajo sólidos pilares estéticos tomando como base la provocación visual y la crítica social comprometida. El colectivo Non Stop enfrenta el consabido choque cultural entre ambos mundos a través de una colección de obras controvertidas, persuasivas, con un marcado acento emergente, afectadas de un espíritu rebelde y sugerente.