La Galería Pedro Cera tiene el placer de anunciar su primera exposición individual con el artista Paulo Quintas.

La abstracción puede ser vista como un anacronismo en nuestros días. Después de haber llegado a su ethos, la pintura, y particularmente la abstracción, solo puede ser concebida fuera de la historia, con los ojos puestos en el futuro y nunca en el pasado. Cuando en la actualidad, un pintor se entrega a la abstracción, esa carga histórica debe ser retirada, o por lo menos suspensa. Pero podrá este movimiento, esta depuración, ser realizable?

La actual exposición de Paulo Quintas en la Galería Pedro Cera, tiene esa aspiración: vaciar la pintura de contenido, de referencias. Para alcanzarlo, Quintas no partió de un tema o una imagen, trabajó a partir del propio formato del lienzo y fue exactamente su geometría interna que determinó las formas que en ella surgieron. Un proceso de descubrimiento, ... de hacer surgir en la piel de la tela imágenes que no representan emociones ni metáforas. Solamente son.

La ejecución en serie, estuvo siempre presente en el trabajo de este artista y aquí surge nuevamente. Los motivos que presenta son pocos y se repiten metódicamente. Paulo Quintas se concentra primeramente en el perfeccionamiento de la técnica. El proceso es racionalizado, huyendo de lo utilizado en otras series que se caracterizaba por la acumulación de materias a través de la sobreposición de capas que a su vez representaban errores que el artista iba dejando presentes en el lienzo. Aquí Quintas depura su método, intentando evitar los errores que volvían las obras anteriores más densas y pesadas. En estos trabajos existen simplemente dos capas: una base monocromática ?untada? por otra capa de un segundo color. A partir de aquí, el pintor excava el lienzo (literalmente con un cuchillo) o la lija, trayendo para la superficie los dos colores. La imagen se aplana.

El proceso es, también como en las series anteriores, violento y agresivo, importando para la pintura una dimensión escultórica y, al mismo tiempo, una profunda carga dramática. Este conjunto de trabajos titulados ?Not That Yellow, Vincent? recapitula la historia (mito?) de un encuentro entre Vincent van Gogh y un crítico que comentaba que la conjugación de amarillos que utilizaba estaba errada, absurda. Su fuga a la convenciones cromáticas y compositivas dotaba sus obras de una dimensión problemática evocada ahora en esta nueva serie de Paulo Quintas.