Hablamos del material y cuando lo hacemos parece que solo tuviera una dimensión técnica. Pero tiene otra dimensión, la de ser aquello sobre lo que creamos un mundo, y la elección del material esta indisolublemente unida a eso. El papel es ese material que, de puro humilde y universal, hace que lo demos por descontado. Es el lugar que prácticamente desaparece a nuestra consideración por ser tan normal y su uso tan variado y cotidiano que se transforma en el aire que respiramos o el suelo que pisamos. Nos trae a casa. Desde esa misma cotidianeidad se presta a todas las transformaciones y es fácil pasar a la tercera dimensión, para volver a la segunda, sin darle importancia, porque es dúctil, ligero y duro a la vez, la materia de las ideas que le da forma y se destruye o transforma con ellas. El mero hecho de un papel en...blanco contiene la provocación del campo de juegos vacío, la hora del recreo, ese lugar del que podemos apropiarnos o al que podemos recurrir. Nada representa mejor la idea de espacio que el papel, por ser la superficie más universalmente utilizada en el mundo civilizado para expresar pensamientos, por estar tan fácilmente a mano y por esa sensación de material mudable y transformable, que lo hace apropiado para cualquier exceso expresivo. En este tiempo de realidades virtuales, el papel tiene una dimensión física que le confiere realidad tangible, y eso lo convierte en algo parecido a la compañía de un amigo.
La obra sobre papel ha tenido tradicionalmente una consideración menor que la pintura sobre lienzo o tabla, o la escultura. Pero eso pertenece al pasado. Esta exposición reúne la obra sobre papel de artistas para los que ha sido una elección de material recurrente, que han materializado sus ideas sobre papel con la misma libertad que en cualquier otro material, evidenciando la contemporaneidad de un invento del siglo II antes de nuestra era.
Bilbao Abril 2022 - Gentz del Valle
Entrada actualizada el el 02 jun de 2022
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