Descripción de la Exposición
La Galería Juan Silió presenta la primera exposición en la galería de Irma Álvarez-Laviada. En su primera individual en Madrid la artista se centra en el proceso de creación deteniéndose en el modo en que transitan las ideas a través de un despliegue de formas circulares.
En su trabajo Álvarez-Laviada desarrolla un estudio sobre la pintura diseccionando y analizando aspectos tan esenciales, pero menos evidentes o tangenciales, como los materiales, los colores primarios o las formas geométricas básicas. En esta ocasión trabaja con el objetivo de dotar al pensamiento de una forma que defina los procesos creativos. El círculo (o la circunferencia), considerada como la forma más perfecta, representa con todas sus variables conceptuales la complejidad que entraña algo aparentemente tan sencillo como Pasar de una idea a otra como se pasa de una curva cóncava a una convexa.
En Aventura. Una filosofía nómada, Rafael Argullol relaciona el pensamiento científico con un tiempo lineal, que si bien tiene algunos momentos de retroceso o ruptura, mantiene una idea de avance en el que cada descubrimiento supera al anterior, se con el fin de desvelar el enigma del conocimiento; por su parte, las humanidades se orientan hacia el interior “dando vueltas en torno a un núcleo enigmático que nunca podremos desvelar por completo”, un pensamiento circular que gira sobre sí mismo y en el que cada nueva aportación convive con las anteriores y en las que el tiempo se vuelve laberíntico, cercano al de la ensoñación.
Esta analogía puede encontrarse entre la vida humana, que transcurre lineal y en sentido único, pero está inserta en el movimiento cíclico de la Naturaleza: tiempo que se mide a través de horas que se repiten a diario, estaciones que pasan y vuelven anualmente. El ser humano se adapta a ellos, encontrando cierto confort en la repetición. No en vano, la esfera corresponde a una necesidad de orientación, y la circunferencia ha sido uno de los primeros modelos interpretativos de los que se ha servido el hombre para organizar su hábitat. Aunque, al mismo tiempo, en cada nueva pasada se alberga la esperanza de hallar una emoción diferente, que se sume al recorrido.
Un gran aro se eleva en la sala erigiendo el espacio. Es el eje a partir del cual se despliega toda la exposición. Dando vueltas sobre sí mismo, un gesto que en cada repetición no se perfecciona, sino que se hace nuevo y diferente. Enuncia nuevas preguntas, abre vías que van y vienen, que se mueven en paralelo, que se rozan con el pasado.
El proceso creativo recoge la contradicción entre el movimiento del cuerpo y de la mente. Mientras el cuerpo avanza lineal y confiado, resulta fácil creer que nuestros pensamientos se comporten como la naturaleza, en un movimiento cíclico en el que las emociones y pensamiento van más lentos. Las ideas avanzan desde un centro profundo, donde habita cierta nostalgia, un recuerdo, a través de los que llegar a nuevas experiencias.
Así el cuerpo entra en un juego que crea sus propias normas, pero las cambia o las contradice fácilmente. Bocetos, restos y muestrarios. Peonzas y aros. Vacíos que llenan el espacio. Manos que rompen la cuadrícula de una libreta trazando una curva que se toca, pero no se cierra, que continúa en busca de nuevas interpretaciones. Que busca expandirse, pero se mueve en el mismo plano. La obra de arte ha de entenderse como un conjunto orgánico y es ahí donde reside su sentido lúdico, que refleja la flexibilidad del pensamiento humano, un proceso continuo que da vueltas.
Un círculo que se expande intentando interpretar un enigma. Que juega con el color, pero regresa al lienzo en un juego de contrastes. Negro sobre blanco, blanco sobre negro. Las manos de Irma Álvarez-Laviada producen explorando otras posibilidades matéricas mientras que su mente conserva la pintura como eje, como motivo inherente que da sentido a su obra.
Kandisnky afirmaba que “El círculo es la síntesis de las mayores oposiciones. Combina lo concéntrico y lo excéntrico en una sola forma y en equilibrio. De las tres formas primarias, apunta más claramente a la cuarta dimensión”. Un portal abierto que se representa con la inclusión en la exposición del proyecto TAL POR TAL del Colectivo ConTRoL, alumnos de Irma-Álvarez-Laviada en la UCM. Este portal se abre y se cierra con el movimiento. Una paradoja más de la capacidad del círculo como acceso. Una investigación que encuentra en el teletransporte y sci-fi un espacio de entrada y salida con el que también entender los cuerpos ajenos al nuestro.
Un discurso compartido a partir del círculo, un diálogo intergeneracional que se escribe a través de un Walkie talkie que lo atraviesa y las conecta. La nueva idea que se toca con la vieja, el arte como forma circular.
Decía Francis Picabia que nuestras cabezas son redondas para que nuestros pensamientos puedan cambiar de dirección. Así, aunque la red de conexiones neuronales suela representarse como un enjambre complejo, quizás solo sea un círculo donde la naturaleza cíclica y a veces abrumadora de nuestros pensamientos conecta saberes de distintos tiempos. Un espacio donde deambulan nuestras obsesiones a la espera de que, al igual que en el arte, alguna de sus ideas pueda convertirse en el centro desde el que trazar nuevas circunferencias.
Esta exposición está organizada con la colaboración con la galería Luis Adelantado.
La carrera de la artista Irma Álvarez-Laviada (Gijón, 1978) podría situarse en el campo de la pintura expandida, en un intento de cuestionar, desde una posición radical, todo aquello que de alguna forma alude a los elementos estructurales de la pintura en su autorreferencialidad como medio. De esta forma, el cuadro se convierte en una entidad autónoma, cuya superficie plana ya no refiere más que a sí misma, superando, por tanto, todo aquello relativo a la representación y la ilusión de profundidad.
Ha recibido reconocimientos como la beca de Artes Plásticas de la Fundación Botín y la beca de residencia para la Cité des Arts de París o la Academia de España en Roma. Asimismo, su trabajo se ha mostrado tanto en ferias internacionales como Maco, Liste, Photo Miami, CIRCA, ARCO, Estampa, etc como en instituciones entre las que destacan Fundación Cerezales Antonino y Cinia (León), Fundación RAC (Pontevedra) y forma parte de importantes colecciones como el Parlamento Europeo, AECID, Colección Pilar Citoler, Colección Mariano Yera, Ministerio de Cultura de España, Fundación Antonio Gala, Galila Barzilai Collection (Bruselas) y la Berezdivin Collection (Puerto Rico). Recientemente presentó su exposición individual en el Museo de Bellas Artes de Asturias.
En 2022 Mario Manso y Daniela Jándula forman Colectivo ContRoL, una agrupación transdisciplinar que surge en el contexto de la Facultad de Bellas Artes de la Universidad Complutense de Madrid con el fin de proponer una búsqueda en el proceso de trabajo que presta atención a los nuevos medios y lógicas de producción. Juntos, han participado en exposiciones como la IX Feria de Arte Aparte de el espacio BelleArte de Cáceres, la Fundación Pons (Madrid) o la Galería GE53 (Valencia). En 2024, fueron becados por el Centro de Cultura contemporánea Condeduque de Madrid para el desarrollo de la residencia Cuerpo de Baile. En ese mismo año participaron en festivales de cine entre los que destaca su video-acción performativa en el festival Los Trabajos y Las Noches (Logroño).
Exposición. 21 may de 2025 - 22 sep de 2025 / Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía (MNCARS) / Madrid, España
Formación. 30 oct de 2025 - 11 jun de 2026 / Museo Nacional del Prado / Madrid, España