PAVESA: Parte muy pequeña y ligera de materia que se desprende de un cuerpo que arde y que acaba convirtiéndose en ceniza.
Hace ya algunos años, durante la celebración de una mesa redonda con otros ilustradores, tuve la osada idea de definir los originales que producimos como "residuos", ganándome inmediatamente la airada reprimenda de algunos de ellos.
Reconozco que el comentario tenía (al menos en su superficie) una intención incendiaria, pero escondía también una idea fundamental que nuestro colectivo no debería perder de vista: así como el fin último de otros artistas es el original (en el caso de los pintores, un cuadro) nuestra meta final no son los dibujos, son los libros, las revistas, los periódicos o los carteles.
Durante el proceso de nuestro trabajo realizamos originales para construir el objeto final, que es nuestra obra.
En ningún caso trato de minusvalorar el original, sino de colocarlo en el sitio exacto del camino,...ya que los ilustradores dejamos rastros.
Rastros maravillosos, preciosos objetos que una vez que han cumplido su misión tienen una segunda oportunidad de brillar, convertidos entonces en satisfechas obras originales, recuperando para siempre su autonomía y su validez gráfica.
Además de convertirse finalmente en ceniza ( como el papel) la pavesa también tiene la posibilidad, antes de enfriarse definitivamente, de prender en alguna otra materia inflamable, abrasándola e iluminándola a la vez.
Tal y como pueden hacer los originales en la vida del que los admira.
Entrada actualizada el el 02 feb de 2016
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