Influenciado y rodeado desde niño de importantes artistas de la talla de César, Antonio Clavé, Paul Rebeyrolle, Philippe Pastor (Mónaco, 1961), se adentra en el mundo del arte de forma autodidacta para mostrarnos a través de su obra, su particular visión de la Naturaleza. Término que para Pastor está lleno de fuerza, de vida, de belleza. Es el todo.

Interesado en igual medida por el Arte y por el Medio Ambiente, Philippe Pastor desarrolla una interacción constante con la Naturaleza, ya que trabaja con y para ella. Sus obras son canales donde expresa esta fantástica relación del hombre con su entorno. Es una forma de expresión que pretende remover la conciencia acerca de la importancia vital que tiene la Naturaleza en la vida.

En su atelier, en pleno bosque en la zona del Alto Ampurdán, Gerona, Pastor desarrolla ... una técnica única de trabajo, usando materia viva, tierras, pigmentos, minerales y plantas en sus obras, que deja, en algunas series, reposar en el exterior buscando esta implicación de la Naturaleza en todo lo que la rodea, para que las condiciones climáticas y el tiempo actúen sobre ellas.

En 2003, desolado por el fuego que arrasó el Massif des Maures, France, trabajó con ansia en su serie de esculturas 'arbres brûlés' ('árboles quemados'), usando para ello, troncos quemados de la zona destruída. Estas esculturas se han convertido en símbolos de la deforestación y pueden verse expuestos alrededor del globo, desde Kenya a Singapur, incluyendo New York Headquarters of the United Nations,asociación con quien el Artista colabora con una exposición permanente dentro del proyecto 'Plant for the Planet: The Billion Tree Campaign', inaugurado en 2007 y impulsado por la United Nations Environmental Program, UNEP.

Después vino la serie 'coeurs' ('corazones'), con un claro mensaje contra la destrucción del Medio Ambiente, bajo la forma de estos corazones en llamas. La pasión que expresa esta serie intenta despertar nuestra conciencia sobre la ceguera del hombre y su falta de pasión frente a los problemas de su entorno.

Su participación en la 52nd y 53rd Venice Biennale, marcaron un punto de inflexión en su obra y en su trabajo. Durante la 53nd edición además, inauguró el Pabellón del Principado de Mónaco, donde exhibió la serie 'Le ciel regarde la Terre' ('El cielo mira la Tierra'). El uso de múltiples pigmentos, mezclados con agua, y llamas de oxí-hidrógeno, le ayudó a crear vividas imágenes que parecen fotografías realizadas desde un satélite, donde se aprecia el cambio en nuestro globo terráqueo y la destrucción de los parajes naturales y zonas boscosas.

Para 'Les quatre saisons' ('Cuatro estaciones'), Pastor se centra en la idea del cambio climático y el ciclo de las estaciones anuales. Bajo el cielo, donde deja sus obras, éstas evolucionan con la Naturaleza, por el efecto del clima y sus condiciones erosivas, transformándose de manera mágica, día a día, sin fin, como los ritmos estacionales. Este proceso creativo es un tributo del artista a la Naturaleza, con quien se considera totalmente unido.

Esta creciente necesidad vital de preservar los recursos naturales de la Tierra, hace que Pastor cree su serie 'H2O'. En ella intenta captar el vaivén de las aguas en la tierra, su movimiento, su fluidez. El principal recurso para la vida. Creados sobre telas que descansan sobre el suelo exterior, utilizando colores vivos y claros que nos recuerdan la belleza de la naturaleza que nos rodea. Es precisamente esto que quiere transmitir el Artista a través de sus diferentes series, hacernos partícipes de su visión del mundo, despertando nuestros sentidos con pasión.

La série 'Révolution' ('revolución'), engloba algunas de las técnicas usadas en series anteriores, dando vida a 'pinturas esculpidas'. Usando telas de tiendas de hospitales militares, el Artista, trabaja con pigmentos naturales mientras moldea el material realizando figuras inusuales, que suspende sobre un lienzo de madera.

En esta búsqueda creadora que anima a Philippe Pastor, alrededor de las relaciones entre el hombre y la Naturaleza, el Artista crea «Bleu Monochrome» ('azul monocromo') que marca una fuerte evolución en su pintura, en concordancia con las series anteriormente realizadas. Las telas interrogan la materia, el formato, el relieve pero también un Arte que nos liga a la Tierra, al entorno. Utilizando materias ricas, untuosas, el Artista busca dar un sentido a aquello que pensábamos perdido.