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La conocida relación de Maurice Ravel (Ciboure, 1875-París 1937) con España se ha asociado generalmente a los vínculos familiares, ya que su padre, suizo de nacimiento, trabajó durante años como ingeniero en la península,en la ... construcción de líneas férreas y al parecer conoció a su madre, vasca nacida en San Juan de Luz, en Aranjuez.

Los expertos señalan también motivaciones creativas, ya que el interés de Ravel por la búsqueda de diferentes formas musicales le llevó a interesarse por la música popular húngara, griega y, sobre todo, española, e incluso por el jazz. Fruto de ese interés fueron numerosas piezas, desde la que da título a la exposición y la 'Rapsodia española', de las que además se cumple el centenario de su estreno, hasta las más conocidas, como la 'Pavana para una infanta difunta', la 'Habanera' de 'Les sites auriculaires', y, cómo no, el 'Bolero'. Su última obra, publicada póstumamente, es 'Canciones de Don Quijote a Dulcinea', escrita para una película que finalmente no vio la luz.

A partir de esta conexión española, el Ayuntamiento de San Juan de Luz, localidad en la que Ravel pasó largas temporadas, ha organizado diversos actos en conmemoración del 70 aniversario de su muerte. De ellos forma parte la exposición 'Ravel, l'Heure espagnole', muestra en la que el peso artístico recae en las obras procedentes de la Colñección ARTIUM, prestadas para la ocasión. Se trata de quince pinturas y dibujos de artistas españoles coetáneos de Maurice Ravel que permiten conocer las diferentes líneas creativas del arte español en la época de madurez del músico labortano.

En ese sentido, la exposición presenta ejemplos del cubismo de José Moreno Villa ('Composición cubista', obra elegida como imagen de la exposición para carteles e invitaciones); del surrealismo de Nicolás de Lekuona ('Sin título') y Benjamín Palencia ('Figura en un paisaje'), el expresionismo de Ismael González de la Serna ('Personaje al borde del mar'), el paisajismo de las primeras obras de Wilfredo Lam ('Paisaje de Cuenca') y de Antonio López Torres ('Paisaje con dos mulas y un labrador') y el realismo social de José Gutiérrez Solana ('La peinadora').

También están representados otros artistas muy significativos del arte español, tanto de la llamada escuela de París como de otros que desde el interior del país renovaron la pintura española, todos ellos de la primera mitad del siglo XX, como Francisco Bores ('Paysage du Midi'), José Caballero ('La cornada'), Ángel Ferrant ('Pase de muleta'), Néstor Martín Fernandez de La Torre ('La Macarena'), Carlos Sáenz de Tejada ('Plaza de la villa de Buitrago'), Jenaro Urrutia ('Naturaleza muerta') y Hernando Viñes ('Jeux sur la plage'). Cabe destacar igualmente la presencia en la selección de una muestra del personal estilo de Pablo Picasso ('Maya').