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Es interesante contemplar como nos relacionamos con los animales, comprobar la intuición que algunas personas demuestran con ellos, como son capaces de comunicarse con un caballo o un perro con un lenguaje evidentemente no verbal o por contra como, en contacto con ellos, nuestro instinto animal nos enfrenta a miedos desconocidos.

Serge Tisseron en su magnífico libro El misterio de la cámara lúcida indaga en la capacidad de la fotografía para interpretar la primera imagen de nosotros mismos (la cara de nuestra madre con la que nos mimetizamos durante los primeros meses) y el reto que supone elaborar las primeras imágenes ajenas (reconocer otras caras). Es incuestionable que la fotografía tiene la elocuencia para reflejar lo interior y lo exterior, lo que transmite el fotógrafo y lo que éste encuentra en el mundo.

Los fotógrafos establecen su punto de vista para aproximarse o distanciarse de la realidad, con respecto a los animales la empatía o alejamiento de sus miradas no son casuales, traducen su interés y su opinión sobre el mundo animal.

La selección que proponemos de autores contemporáneos de Foto Colectania, quiere remarcar la diversidad de planteamientos artísticos de las seis décadas de fotografía que abarca nuestra colección y la riqueza de las miradas a veces distantes, irónicas, intuitivas o reflexivas sobre un tema que nunca deja indiferentes a los fotógrafos.

Las puestas en escena de la serie Enlloch de Ballester, los enmascaramientos de Balanza, el sentido del humor de Miserachs -que recuerda a Eugène Smith-, la obsesión de Caramés con su Visión Animal, los juegos caninos de Armengol, los encuentros de viajeros ilustrados como García Rodero, Sanz Lobato y Castro Prieto, la simbólica aproximación de Madoz a los animales. Todos ellos son estupendos motivos para revisitar nuestra colección y entrelazar imágenes en un discurso abierto, tan amplio como el mundo de la fotografía.