Obras realizadas en madera y bronce de suma elegancia y delicadeza. Esculturas elevadas sobre peanas de hierro que nos muestran modelos en poses cotidianas; mujeres que toman el sol, personajes recostados en su sofá…, diferentes exploraciones del cuerpo humano en posturas desenfadadas.

Cabe destacar de estas obras los tocados y rasgos faciales inspiradas en el arte primitivo de distintas culturas antiguas; máscaras africanas, ojos egipcios, sombreros orientales incluso tocados de rasgos ibéricos.

La unión perfecta entre la naturalidad de sutiles modelos que parecen simpatizar con el espectador y la rotundidad y fuerza de las formas primigenias.