Un nuevo ciclo renace. Creadores y creadoras forjan siempre pensamiento crítico, sea sobre lienzos, superficies erosionadas, como imágenes fugaces o pensadas para perdurar, tejidos entretejidos, telas enteladas, mecanismos accionados, interruptores que encienden mentes o punzan corazones. Nada de ello pasa de moda, en la infinita capacidad para reinventar. Son movimientos y resortes tan antiguos como el caminar. A pesar de las evidentes dificultades sociales y políticas, la vida no es más que un lienzo en blanco, en contextos diferentes, desiguales, benignos e incluso malignos.
El gran escenario que proporciona Espacio 120 esta primavera es un campo de experimentación artística, un altavoz de cánticos registrados a lo largo de sus paredes, adheridos a sus cementos y en constante diálogo unos con otros. Centenares de obras, decenas de artistas cuyos orígenes diversos, allende océanos y continentes, jalean el paisaje de lo creativo. Contenidos más bellos o más incómodos en busca de reacciones, removiendo...sentimientos o conciencia, alegatos contra la realidad que subviertan el orden para reclamar, frente a la cultura de lo fácil y lo inmediato, un lugar de reflexión y autenticidad.
Pero el Arte es más, es conciencia, emoción y pensamiento materializado en los más variopintos canales de comunicación creativa. Para uno mismo, para nosotros y para todos y todas.
Imágenes de la Exposición
Fina Solé — Cortesía de Espacio 120
Entrada actualizada el el 22 mar de 2019
¿Te gustaría añadir o modificar algo de este perfil?
