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La Obra Social de la entidad ofrece la particular visión de las fiestas de Sevilla de este fotógrafo nacido en Hungría y nacionalizado en Francia, a través de las fotografías que realizó para un reportaje sobre la ciudad destinado a la revista americana Harper's Bazaar. La serie completa de imágenes las publicó posteriormente en una de sus más conocidas obras, "Seville en Fête", un homenaje a la cultura sevillana que la ha difundido mundialmente.

En estas imágenes el fotógrafo indaga en las para él extrañas tradiciones sevillanas, destacando el fuerte contraste entre la pasión de la Semana Santa y la alegría de la Feria. Oliva María Rubio, comisaria de esta exposición, escribe que "la Semana Santa le atrae por la suntuosidad de la ceremonia religiosa, la extrañeza de la puesta en escena, las procesiones llenas de gente, ... los Cristos agonizantes y las Vírgenes engalanadas…". Por el contrario, "de la feria de abril, Brassaï nos muestra la alegría de la fiesta; palpamos el bullicio de la gente; nos lleva de la mano a través de los preparativos –mujeres cosiendo y portando los vestidos con volantes, típicos de la fiesta–, de las corridas de toros". Para Brassaï, en la Feria las clases sociales parecen igualarse, en sus propias palabras, "duquesas y gitanas se codean, exhibiendo con el mismo orgullo su belleza, su elegancia, su riqueza."

Brassaï acompañó las imágenes de profusas anotaciones, con objeto de que fueran entendidas en su contexto fuera de España. Resultan pues curiosos para el sevillano estos comentarios que describen las fotografías, las casas, los patios, los olores, los rituales y situaciones. A través de las imágenes y las notas el autor reflexiona sobre el mestizaje de culturas, la mezcla de lo religioso y lo profano, y lo que él denominó un "barroco fantástico".

Así, define los pasos como "inmensos carros que transportan, a través de la ciudad, una multitud de estatuas: 73 Vírgenes, 21 Cristos y 28 escenas de la Pasión… precedidos y seguidos por penitentes". Y describe el baile por sevillanas como "especie de cuadrilla con varias figuras en la que los hombres y las mujeres se buscan, se cruzan, se giran y se rodean en todos los sentidos, sin jamás tocarse, sin ni siquiera mirarse… mientras los espectadores marcan el ritmo ruidosamente con los tacones y las manos."

Gyula Halász es el nombre real de Brassaï, que utilizó este seudónimo a partir de los años treinta en honor a su ciudad natal, Brasov (anteriormente Hungría y hoy Rumanía). Nacionalizado en Francia, se relacionó con los principales exponentes de las vanguardias, y tras el éxito de su libro "Paris le nuit", sobre la capital francesa, comenzó a trabajar en las revistas de arte más relevantes y las más prestigiosas publicaciones internacionales. Fue colaborador habitual de Harpers Bazaar durante casi treinta años, hasta los sesenta. De su vinculación con Picasso surgieron obras como "Les esculptures de Picasso" o "Conversations avec Picasso".