Es la primera exposición en México del artista coreano Lee Jaehyo. Nos presenta 8 esculturas y 11 obras a muro que se centran en materiales tomados de los árboles. Los primeros trabajos del artista estuvieron enfocados en el ámbito del land art que, a grandes rasgos, consiste en tomar materiales de la naturaleza como piedras, pasto, hojas para crear, como en el caso de Lee Jaehyo, esculturas monumentales en los mismos paisajes de donde se tomaron, como bosques y planicies. En este punto, es visible el fuerte vínculo entre la creación del artista y la naturaleza; hecho que veremos a lo largo de la exposición a pesar de estar lejos del mundo natural.

En vuelta a la materia, se muestra la fascinación de Lee Jaehyo por el árbol y los materiales que brinda éste, en específico la madera y el ... carbón. El árbol es vida, y puede ser contradictorio utilizar una cantidad enorme de troncos para crear esculturas; sin embargo, en la obra de Lee hay una justificación a partir de lo que muestra en sus materiales. La visibilidad de los anillos de crecimiento en ciertas sus esculturas, es una forma de llevar al espectador al origen natural; así como los troncos que pasan por mínimos procesos para la construcción de las esculturas. Es decir, no llegan a convertirse en madera industrial.

En contraste a la forma de presentar los troncos en un sentido más cercano a lo natural, las esculturas realizadas con segmentos de cárbón, donde los clavos se vuelven el material principal de la obra, parecen más artificiales. Sin embargo, en ambas formas de trabajar el material, la artificialidad esta basada en las formas caprichosas que el artista da a su obra. Los clavos dejan de ser sujetadores para convertirse en trazos del dibujo en cada una de las obras a muro y esculturas.

Vuelta a la materia, es una exposición que nos lleva a reflexionar sobre los distintos conceptos de la materia. En primera, la ocupación del espacio de estas esculturas nos permiten tener una percepción de la masa, la denisdad y el peso de la materia, sin ir a la parte cuantitativa, es mera sensación cualitativa. Por otra parte, la materia vista como lo primero que subyace a cada cosa, señala al árbol como la naturaleza de la obra de arte de Lee Jaehyo, quien subraya lo asumido y olvidado. Las cosas de la naturaleza están en potencia de, y en este caso son generadoras del mundo estético de Lee.

La reflexión sobre la materia sensible está fundamentada en la forma, por lo que podemos decir que materia y forma constituyen las obras de arte de Lee por naturaleza. Pensemos en las formas esféricas que aluden a una perfección imitada de lo natural; la Tierra, la Luna y los planetas que se han imaginado y observado esféricos. Ésta es una forma constante en la obra del artista coreano. Así mismo, la forma ovular que vemos en una pequeña escultura, el huevo es origen y está en potencia de algo.

Por último, es necesario señalar la reflexión sobre la materia prima (madera y clavos) en el ámbito de la construcción de nuestro mundo sensible, que nos ha separado de lo natural. Las casas y los edificios son el lugar dónde nos ocultamos y protegemos de un exterior natural que casi hemos olvidado. Nuevamente la obra de Lee Jaehyo nos recuerda a la naturaleza, de la cual constantemente tomamos su materia para crear.