El agua en su estado líquido, tiene la capacidad de filtrarse por todas las fisuras, agujeros y poros, a la vez que a su paso erosiona y esculpe los materiales por los que se desliza. Lo llaman el Disolvente Universal. Como decía el amigo Bruce Lee, 'El agua puede fluir o puede golpear. Si pones agua en una taza, se convierte en taza, si pones agua en una botella, se convierte botella '. Los proyectos que se desarrollan en este ciclo imitan las propiedades del elemento líquido, aprovechan resquicios y agujeros para filtrarse a través de un sistema social, cultural y económico en crisis. Plantean diferentes estrategias productivas que superan el discurso de la precariedad, trabajan con los medios que tienen a su alcance, e imaginan alternativas que evocan posible. Prestando atención a las circunstancias y en cada contexto, proponen formas de resistencia que permiten esquivar las estructuras de poder.