Se trata de la primera exhibición individual de la artista en México. La exposición se enfoca en la imagen y la construcción de narrativas que desde el malestar y/o humor, ponen en tensión los límites entre la ficción y el documental, e incluye la nueva comisión titulada MATRULLA. Los filmes de Santiago Muñoz -soporte sobre el que generalmente trabaja la artista- evidencian una clara cercanía a la tradición del cine documental y/o etnográfico; apropiándose de la capacidad del género para asumir una postura crítica que va más allá del mero retrato de acontecimientos. Esta exploración se conduce al subvertir el archivo documental, incorporando el elemento de ficción en la situación. La memoria, el paisaje y el sujeto abordados, son los elementos sobre los que discurre su obra; una postura que bajo el dispositivo de representación cinematográfico, explora y restituye la memoria histórica de ciertas comunidades.