Los dibujos de Chancho, de formato variado, manifiestan la esencia expresiva de su obra. El ritmo y repetición de los trazos de color que, según la complejidad del diseño, se complementan con fragmentos e interrupciones, evidencian una intensa búsqueda del aspecto poético de la pintura al tiempo que reconstruyen el proceso creativo. Joaquim Chancho pertenece a una generación que comparte la preocupación por el dominio de la técnica con el fin de conducirla a la reflexión sobre el proceso de evolución y recreación de lo artístico.

Al igual que sus dibujos y a pesar de la distancia que guardan con la figuración, los grabados de Chancho remiten de manera oblicua a tejidos y estructuras presentes en el entorno: la trama de los muros de piedra, los campos roturados, la orografía o el trazado de caminos, señales o símbolos de un lenguaje ordenado. La serie de grabados, realizada en el taller de ... Tristan Barbarà, evidencia las múltiples posibilidades contenidas en un espacio pictórico adusto, en el cual el orden de los elementos proviene de tramas, multiplicaciones, segmentaciones espaciales, superposiciones, capas, fusiones o interrupciones reticulares que sirven para demostrar la manera en que el artista re-ordena las claves de un entorno más bien desestructurado e imprevisible.