'Uno debe de vez en cuando intentar

cosas que están más allá de su

capacidad'

Auguste Renoir

Perspective on wood es la obra de un artista que se inició en el mundo de la escultura, buscando nuevas ideas que le llevaron a avanzar en el mundo del arte por nuevos caminos como fue el de la pintura.

Fruto de esta conexión nace esta exposición, la creación de Carlos Montero que nos sorprenderá por su carácter heterogéneo: tradicional, urbano, natural...

Precisamente por esto, la sola presencia en la sala no nos dejará indiferentes, es muy posible que al salir de ella la abandonemos con ideas que rondarán nuestra cabeza al ver obras de arte ... que nos desconcertarán. En esta exposición no encontraremos sólo paisajes, retratos, escenas de la vida cotidiana, sino que el artista nos sumerge en un mundo nuevo no acostumbrado a contemplar.

Carlos no quiere romper con la pintura sino todo lo contrario, lo que desea es fusionar el arte tradicional y el arte urbano utilizando diversos soportes, desde los clásicos como el lienzo o tablas de madera hasta otros que nos asombrarán al encontrarlos en esta exposición. Así conseguirá nuevas sensaciones en el espectador: nadie quedará impasible al observar una ventana vieja y tener la necesidad de abrirla para ver lo que esconde, una puerta de una casa que se convierte en el marco y lienzo de la obra o un cofre pintarrajeado cuyo travieso autor descansa en el interior.

El realismo que contemplamos en los niños de los cuadros nos acerca a la tercera dimensión, nunca hemos estado tan cerca de la infancia. El artista se sumerge en la mente de estas criaturas hasta convertirse en parte de él y lo refleja en sus cuadros como podemos observar en la niña del abrigo rojo. Así las figuras se salen del marco establecido consiguiendo casi la anamorfosis que hemos visto utilizada en artistas de épocas pasadas como en Holbein.

El artista toma estas ideas, las revuelve con sus materiales alterándolos, modificándolos, transformándolos hasta alcanzar la Idea que le obsesiona y el resultado será el acercamiento a su mundo, a su vida, a su interior, a su pensamiento y, por último a su corazón, el cual tiene necesidad de crear su obra, para poder encontrarse a sí mismo. Lo siguiente que hará será cuidarla con cariño, preocuparse por ella, enseñarle la vida para que pueda sobrevivir en este mundo. El artista como cualquier padre no la abandonará a su suerte y la tendrá a su lado sin terminar nunca la obra.

Carlos no cesará en su empeño de innovar, de crear de buscar nuevas y diferentes maneras de despertar algo en el interior del espectador con sus obras, ya que si lo hiciese perecería como diría Picasso. Así inventa hasta la extenuación basándose en ideas nuevas pero partiendo del principio del arte, transformando todo lo que toca en su propia creación.