La exposición still de Julia Aurora Guzmán hace referencia al vacío activado por el recuerdo de una presencia pasada. Es la exteriorización y formulación de un proceso de duelo. Como el término japonés nagori, que significa “la huella de las olas”, remite a la nostalgia del ciclo que termina y a la atmósfera de algo que ya no existe o aún ha de existir. Compuesta por un conjunto de piezas formalizadas en distintos medios que constelan alrededor de una escultura central, still busca la luz que brilla a través de las grietas y aquello que puede brotar del final de un ciclo. Quietud en el ojo del huracán, quietud en la meditación. Es en el agua quieta donde se forman las ondas y en el silencio donde se escucha la gota: volviendo al presente, a la fuente consciente de su propia finitud.