Fundación MAPFRE presenta, hasta el 28 de febrero, en su sala de exposiciones, situada en la Calle Bárbara de Braganza, 13, en Madrid, la primera gran retrospectiva de la obra de la fotógrafa chilena Paz Errázuriz (Santiago de Chile, 1944), comisariada por el valenciano Juan Vicente Aliaga. 

La muestra recorre, a través de más de 170 obras, cuarenta años de la dilatada trayectoria de esta fotógrafa, y abarca desde sus primeras obras, de mediados de los años setenta, hasta sus series más recientes.

Las fotografías reunidas "se centran en entornos marginales e individuos que no encajaban con las normas de comportamiento tradicionales, personas desprotegidas que dormían al raso, hombres y mujeres recluidos en psiquiátricos, miembros de circos pobres, travestis perseguidos por la policía, etc", explican desde la Fundación.

Paz Errázuriz "construye unas imágenes con personajes llenos de dignidad y de naturalidad, lo que seguramente, se debe a su método de trabajo que se basa en la convivencia con sus retratados creando un clima de confianza y respeto necesario para sacar de ellos toda su dignidad", destacan los organizadores de la muestra.

La propia artista define así su trabajo: "Yo trabajo en series cerradas, en algunas puedo estar años. Y no siento que pertenezca a ningún grupo, pero me siento cerca de todos. Son temas donde la sociedad no pone su mirada, y pretendo dar ánimo para que la gente se atreva a mirar".

Errázuriz es, sin duda alguna, una de las fotógrafas chilenas de mayor reconocimiento internacional, representante, por ejemplo de su país en la última Bienal de Venecia de este año, junto a su colega y compatriota Lotty Rosenfeld (Santiago, Chile, 1943), y bajo la curaduría de Nelly Richard, o último Premio PhotoEspaña 2015, en reconocimiento a su trayectoria.

Entre sus últimas exposiciones individuales la organizada por D21 Proyectos de Arte (Santiago de Chile), donde se presentó la serie "Luchadores", la cual también se incluye en la publicación de su nuevo libro.

De formación autodidacta, Paz Errázuriz inicia su carrera en los difíciles e inciertos años 70, de Chile marcados por la llegada de la dictadura de Pinochet y una fuerte represión.

"Por ello salir a la calle a hacer fotografías era, muchas veces, una actividad de riesgo, riesgo mayor en el caso de una mujer", subrayan desde Mapfre.

Su compromiso social y colectivo se vio también reflejado en la decisión de fundar, en 1981, junto con compañeros de profesión, la Asociación de Fotógrafos Independientes (AFI).

Su trabajo, que ha podido verse en numerosas muestras individuales o formando parte de colectivas, integra algunas de las principales colecciones públicas y privadas del mundo y está representado comercialmente por la Galería Afa de Santiago de Chile.