Barcelona, España - El informe Festivales de fotografía en Cataluña: estado de la cuestión y propuestas de mejora, elaborado por la periodista y fotógrafa Wayra Ficapal por encargo de la Fundación Photographic Social Vision, ofrece un análisis detallado del panorama actual de estos eventos en la región. Su objetivo es promover la reflexión sobre el sector y proponer acciones para mejorar las prácticas profesionales y combatir la precariedad que lo afecta.

El estudio revela cifras destacadas sobre los festivales de fotografía en Cataluña. Con un total de 35 festivales activos, mayormente de pequeño y mediano formato y abarcando una amplia variedad de géneros, la mayoría de estos eventos surgieron tras la desaparición del festival bienal Primavera Fotogràfica en 2004. La provincia de Barcelona concentra el 59% de los festivales, seguida por Girona (24%), Tarragona (12%) y Lleida (6%). Aunque los festivales se distribuyen a lo largo del año, el 57% se concentra en los meses de octubre, noviembre y septiembre.

De acuerdo al informe, la financiación de estos festivales proviene mayormente de entidades públicas, como ayuntamientos, diputaciones y la Generalitat de Catalunya. Sin embargo, también recurren al patrocinio privado, la venta de entradas y otras fuentes de financiación. El informe reporta que más de la mitad de los festivales tienen un presupuesto que oscila entre 40.000 y 150.000 euros, presupuestos que llevan a dificultades económicas. Por ello, la precariedad laboral es una preocupación central en este informe.

Art Photo Bcn, uno de los festivales evaluados en el informe

Los bajos presupuestos repercuten en la remuneración de sus directores y en la compensación de los artistas que participan en ellos. En cuanto a la remuneración de les directores de festivales, solo el 41% considera recibir una compensación justa. En relación con la remuneración de les fotógrafes participantes, se destaca que el 75% ha recibido propuestas de participación sin honorarios asignados, y solo el 9% ha recibido una remuneración justa. Además, se menciona que muches fotógrafes no reciben compensación por gastos de transporte y alojamiento, y algunos festivales no cubren los costos de producción de las obras exhibidas. Además, la falta de contratos escritos y la escasa transparencia en la evaluación de los festivales contribuyen a la inestabilidad en el sector y dificultan el establecimiento de buenas prácticas.

El informe recuerda a los festivales a hacer uso de los códigos de buenas prácticas profesionales; herramientas impulsadas por asociaciones de artistas y fotógrafes para mejorar las relaciones en el sector. En el ámbito de los festivales de fotografía, se destacan tres códigos: el Manual de buenas prácticas profesionales en las artes visuales, el Codi de bones pràctiques professionals a les Arts Visuals y la Carta de compromiso FOC de buenas prácticas profesionales. Estos códigos se basan en tres premisas esenciales: la remuneración a les artistas, el respeto a sus derechos de autor y el uso del contrato por escrito. El cumplimiento de estos principios fue acordado por diversos sectores del arte contemporáneo y el Ministerio de Cultura en 2007. Según el Informe FOC 2023, el 92,4% de los festivales de fotografía estudiados afirma tener en cuenta la aplicación de las Buenas Prácticas Profesionales en su gestión. Un porcentaje menor aplica estas prácticas de manera parcial, mientras que una pequeña proporción no las aplica o desconoce su aplicación.

Festival de Fotografía del Baix Empordà, Festival Mirades 2023 que se celebra en Torroella de Montgrí, uno de los festivales evaluados en el informe

A pesar de estas dificultades, los festivales de fotografía en Cataluña se destacan por su falta de censura y su compromiso con la libertad de expresión artística. La gran mayoría de las personas encuestadas afirman no haber sufrido injerencias por parte de las instituciones y no haber tenido que modificar el contenido de sus obras o actividades debido a presiones externas.

En conclusión, el informe destaca la importancia de abordar la precariedad laboral en el sector de los festivales de fotografía en Cataluña y promover prácticas más equitativas y transparentes. Además, resalta el papel crucial de estos eventos en la promoción de la cultura visual y la libertad de expresión en la región. Los datos del informe se obtuvieron a través de encuestas a organizaciones de festivales y fotógrafes participantes, entrevistas cualitativas y reflexiones de los eventos mencionados, así como la investigación propia de la autora. Entre los hallazgos se destacan la necesidad de garantizar que los festivales financiados públicamente paguen honorarios a los artistas, crear una ley catalana de mecenazgo, fomentar la transparencia y denunciar malas prácticas, entre otras acciones sugeridas.

Así mismo, el informe propone una serie de acciones a corto y medio plazo para mejorar las prácticas en los festivales de fotografía en Cataluña. Según las personas encuestadas, estas acciones incluyen la creación de un calendario de eventos, compartir recursos, establecer un circuito expositivo catalán, así como compartir información y promover la itinerancia de exposiciones entre festivales. Les fotógrafes también destacan la necesidad de mejorar los honorarios asignados, establecer pactos contractuales y baremos retributivos coherentes, además de promover la paridad de género en las actividades programadas.

Puedes leer el informe completo aquí.