A través de la pintura en sus diferentes formalizaciones e investigaciones, los artistas manifiestan sus profundidades en cuanto a las cuestiones perennes a su tiempo. A pesar de la ambición de racionalizar y tampoco delinear la contemporaneidad, la producción de esos jóvenes artistas es ante todo un registro de su propia fe en consonancia con el espectro de su personalidad.
En el caso de Gokula Stoffel, los tres momentos elementales de la pintura en la historia del arte, como el paisaje, el retrato y la naturaleza muerta, recorta estos elementos y los distorsiona en colores y texturas translucidas. Su rutina en la práctica con pintura, transforma la pantalla en un objeto enigmático, que cuestiona el espacio alrededor e ignora los procesos académicos y estructurales del arte. Sus paisajes se presentan en diversos soportes y materiales, como vidrio, redes, lanas, cintas, hojas de aluminio, invirtiendo en experimentaciones de manera en que el...trabajo en sí no se propone un límite. Esta irreverencia de la pintura es lo que se desdobla también en la investigación de Tomaz Rosa.
Rosa suspende las posibles lecturas sobre el mundo en un juego de referencias a los artistas de la generación paulista de los años 80. Así, reflexiona sobre la pintura como objeto de observación en una discusión sobre imitación y copia, al mismo tiempo que explora las posibilidades del gesto romántico . Los temas y proposiciones en la pintura de Rosa sugieren que el espacio no puede ser visto desde fuera, entendiendo el campo de visión como algo que se encuentra alrededor, y no sólo al frente. Sus abstracciones sugieren una inmersión de quien ve la pintura, proporcionando una narrativa libre de reglas y contextos, reforzando lo que Camile Sproesser presenta en la Sala Oeste de la galería.
Camile explora la potencia de los colores, que tiene como aliada una composición bastante particular, pinceladas que dejan rastro y un volumen de tinta que atrae los ojos del espectador. Los personajes, animales, palabras y diversos elementos dialogan, sea en un juego de experimentaciones casi infantil, sea en la fuerza de las figuras femeninas. La artista establece su espacio pictórico a través de manchas y diversas capas de tinta, transformando ese conjunto en narrativas curiosas impregnadas por colores fluorescentes y un mundo singular. ¿Qué hora se hace claramente claro en una fracción se muestra cargado de posibilidades provocativas que sugieren la duda sobre lo que se tiene y lo que se ve.
El esfuerzo de la pintura contemporánea es la propia multiplicación de sistemas que rompen su conexión a la superficialidad del objeto, ya sea que estos sistemas tengan naturaleza figurativa o no, o creen nuevos materiales o reinventen antiguos. El movimiento de reencuentro con su propio fundamento, hace la producción de esos artistas coherentes entre sí.
Entrada actualizada el el 08 feb de 2019
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